Observatorio Islamofobia Por un periodismo inclusivo frente a la islamofobia
Publicado originalmente por Abigail Geiger en www.pewresearch.org
La opinión predominante (con una media regional que alcanza el 50%) es que a las mujeres musulmanas se les debe permitir usar ropa religiosa siempre que no cubra completamente su cara. Un 23% de los encuestados consideran que las mujeres musulmanas no deben llevar ningún tipo de ropa religiosa. Un 25% opina que a las mujeres musulmanas se les debe permitir usar cualquier vestimenta religiosa que elijan.
En Reino Unido, por ejemplo, el 53% de los adultos no musulmanes dice que a las mujeres musulmanas se les debe permitir usar ropa religiosa siempre que no les cubra la cara, mientras que el 19% está a favor de restringir toda vestimenta religiosa. Aproximadamente un 27% de los encuestados apoyan que las mujeres musulmanas usen la vestimenta religiosa que elijan.
Las leyes promulgadas recientemente en diversos países europeos no apuntan explícitamente a la vestimenta de las mujeres musulmanas. En el caso de Dinamarca, por ejemplo, se prohíbe el uso de complementos que cubran el rostro, exceptuando «finalidades reconocidas» como combatir la fría temperatura propia del invierno. Los defensores de estas leyes se apoyan en la seguridad pública. Los opositores, por su parte, indican que esta normativa está injustamente dirigida contra los musulmanes y consideran que las personas deben tener la libertad de vestir con lo que quieran.
En general, la mayoría de las personas en Europa dicen que aceptan minorías religiosas, incluidos los musulmanes. Por ejemplo, una media del 66% de los adultos no musulmanes dicen que aceptarían a un musulmán como miembro de su familia, según una pregunta de la encuesta. Sin embargo, la gran mayoría de los encuestados son favorables a la prohibición del uso de prendas que cubran el rosto, incluso entre los no musulmanes con sentimientos positivos acerca de los musulmanes ,como Alemania, el Reino Unido, Austria, Suiza y los Países Bajos. Sin embargo, no sucede lo mismo en todos los países. Aproximadamente seis de cada diez adultos portugueses con estos sentimientos positivos hacia los musulmanes no son partidarios de imponer restricciones a la vestimenta religiosa.
Entre los europeos occidentales que dicen que no estarían dispuestos a aceptar a un musulmán en su familia, existe un apoyo significativo a las prohibiciones. En Francia, por ejemplo, el 43% de estas personas respaldan una prohibición total, mientras que, entre aquellos dispuestos a aceptar a musulmanes en su familia, este porcentaje de personas que apoyan las prohibiciones desciende al 16%.
