Bots anónimos propagan la islamofobia a través de las redes sociales. Se trata de dispositivos automáticos que amplifican los mensajes racistas y xenófobos en medios 2.0 como Facebook, Twitter, etc. Actúan desde identidades falsas o ficticias para alimentar el discurso del odio contra los musulmanes de todo el mundo, en especial, después de atentados terroristas o conflictos sociales. Funcionan tanto redistribuyendo material procedente de cuentas reales como captando la atención de otros perfiles humanos con fake news o manipulaciones informativas.
Investigadores de la entidad sin ánimo de lucro Hope not hate han analizado el comportamiento de internautas y blogs de este tipo para descubrir cómo se valen de esta estratagema y han llegado a la conclusión de que “todo vale” para aumentar el volumen de sus audiencias. La mentira, la alteración de imágenes, la descontextualización de datos, etc. se ponen al servicio de activistas como Pamela Geller, cuyos mensajes en Twitter se han beneficiado del apoyo de 102 robots.
Publicado originalmente por Josep Lluís Micó en La Vanguardia el 03 de enero de 2019.
Los dispositivos automáticos que amplifican los mensajes racistas y xenófobos en las redes sociales siguen la política del “todo vale”