Publicado por en la web de Political de Economic and Social Research (SETA) el 2 de abril de 2018.
Este es el tercer informe de periodicidad anual European Islamophobia Report (EIR) que incluye una evaluación general de la islamofobia en 2017 e informes sobre 33 países, casi todos los Estados miembros de la Unión Europea (UE) y países adicionales como Rusia o Noruega. El EIR de 2017 recoge el trabajo de cuarenta académicos destacados y activistas de la sociedad civil de varios países europeos.
El mero hecho de negar la existencia de la islamofobia (o racismo anti-musulmán o delito de odio anti-musulmán) en Europa demuestra la necesidad de que se realice un esfuerzo apropiado y haya voluntad política para atajar este racismo normalizado y sus manifestaciones arraigadas en las sociedades, instituciones y Estados de la UE.
La negación de esta forma de racismo no es solo cosa de los grupos extremistas de la periferia política de la sociedad puesto que ya se ha trasladado al centro del poder político. En consecuencia, ya no son solo los grupos de la extrema derecha los que dependen de la propaganda y las retóricas islamófobas: los socialdemócratas, los liberales, la izquierda o los conservadores no son inmunes a esta forma de racismo.
Tal y como publicó una encuesta realizada por la Agencia de los Derechos Fundamentales (FRA), el 76% de los musulmanes encuestados se sienten profundamente apegados al país en el que viven, y un 31% de los que buscan trabajo ha sido discriminado en los últimos cinco años, aunque solo el 12% de los musulmanes dice haber denunciado casos de discriminación, lo que nos permite concluir que el alcance de la discriminación que sufren los musulmanes en Europa es mucho mayor que lo que indica cualquier informe europeo sobre islamofobia y delitos de odio. En otras palabras, se puede afirmar que todos los datos y estadísticas sobre islamofobia en Europa dejan solo ver la punta del iceberg.
Revelar la comprensión del racismo islamófobo estructural es el objetivo del proyecto del European Islamophobia Report, que de forma anual analiza las tendencias y desarrollos en prácticamente todos los Estados europeos y algunos países de los aledaños de la UE, desde Rusia a Portugal y desde Malta a Noruega.
Este informe constituye una fuente valiosa de conocimiento para cualquier sector del público interesado en el desarrollo del racismo y la islamofobia en Europa. El informe, además de ser accesible y completo, es una herramienta a disposición de cualquier activista o legislador cuyo objetivo sea prevenir la islamofobia.
Cada informe nacional va acompañado de las recomendaciones del técnico que lo ha realizado y que servirá de apoyo a todas esas fuerzas dentro de las sociedades europeas que trabajan por la igualdad y contra toda forma de racismo.
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